martes, octubre 23

La Huerta de España



El otro día en el trabajo alguien preguntó "¿Qué es un acuífero?". Efectivamente, cuando terminas la carrera, para un ambientólogo de la Universidad de Alcalá, acuífero resulta una palabra tan común y obvia como a un economista lo es la diferencia entre coste y gasto o la palabra externalidad.

Pero para cualquier persona corriente, no es tan obvio.

Según la RAE:
2. adj. Geol. Dicho de una capa o vena subterránea: Que contiene agua. U. t. c. s. m.

Más completa, sin embargo, sobre todo para a entender lo que contaré a continuación, me parece la wiki-definición:
"Un acuífero es aquel estrato o formación geológica permeable que permite la circulación y el almacenamiento del agua subterránea por sus poros o grietas"

Es decir, sacamos la conclusión de que está debajo del suelo, y que no es un hueco, como pudiera ser un río subterráneo (no necesariamente, salvo en acuíferos kársticos que sí suelen incluir como parte de ellos estos elementos). La tierra puede contener agua, algo obvio (ver barro); pero además, aunque pensemos al imaginar el barro que el agua está ahí, estática, mezclada con "la tierra" (según tamaño de partícula, limo, arcilla, arena...) de forma estática, dándole ese aspecto de plasticidad, ese agua en forma de partículas se desplaza entre grano y grano a mayor o a menor velocidad, imperceptiblemente para el ojo humano (lo que no vemos no tiene por qué ser imposible o no existir).

Un río super lento que circula entre grano y grano de la tierra por debajo del suelo, o un lago, si el agua apenas circula. Así, "explicao" a la española.

Otra de las características del agua subterránea (la que guardan los acuíferos) que la diferencia de la superficial (la que circula por los ríos), es la inaccesibilidad (obvio). Esto supone un ventaja: más difícil de contaminar, más difícil de consumir, más fácil de almacenar, mayor perdurabilidad al no sufrir la acción evaporadora del sol.

Vista esta introducción, decir que hay "tipos de suelos", más propensos a generar acuíferos, que otros (más o menos permeables). Norte de España, mal... pero afortunadamente, allí llueve mucho. Sureste de España.... bien, para suplir que, precisamente, allí llueve poco (casualidades de la inteligencia natural de la naturaleza y la geología).






Lorca, que está en Murcia. Murcia no es una región sin agua. Murcia tiene agua, ha tenido históricamente agua; tiene uno de los principales ríos de España, el Segura (aunque ya lo hayan esquilmado), y tiene importantes acuíferos que, antaño, ofrecían el recurso agua para la demanda regantes de regadío.


El problema es que la avaricia rompe el saco. El pastor no lleva al rebaño a donde sabe que no hay pasto. Entonces, ¿por qué se aumenta y aumenta y aumenta la producción de regadío en la provincia española con el mayor índice de evapotranspiración del país? Sí porque, aunque ya nos hayamos cargado el río, y hayamos reventado irremediablemente nuestros acuíferos, como el agua es un bien público y es de todos, puedo quedarme con la que "le sobra al Tajo" (ver transvase Tajo-Segura); pero eso es otra historia, aunque relacionada, porque todo está conectado.

Volviendo al asunto del acuífero: Áumenta la demanda, pero no puedes aumentar la oferta: los ríos se secan y los acuíferos también.
El problema de los acuíferos es que no se pueden secar y esperar a que el año siguiente se vuelva a llenar. No es un tanque ingenieril diseñado para eso. Es un sistema dinámico y natural. Si se seca se rompe. ¿Recordáis qué ocurría cuando de niños dejábais el blandi-blue destapado? ¿Alguna vez intentásteis arreglarlo volviéndolo a humedecer? ¿Y funcionó? Es más, probablemente visteis como algo que era plástico y elástico se quedaba rígido y frágil. Incluso "se hacía más pequeño". Obviamente el agua ocupa un volumen y al desaparecer, provoca la contracción de aquello que la contiene (además de su desecación y pérdida consiguiente de características físicas de plasticidad... es decir se vuelve frágil).

¿Me váis siguiendo con respecto al artículo de El País que he enlazado antes?

Esto no es algo de ahora. Ni que se acabe de descubrir; ni que no esté sobradamente estudiado. La ciudad más poblada del mundo, México DF, se está hundiendo desde hace años precisamente por la sobreexplotación de un acuífero sobre el que se asienta (ver).

Bien. Se sabe lo que está pasando. También se sabe lo que puede pasar. Se sabe que Lorca está en zona sísimica y que cada 20 años puede haber un terremoto grande. ¿Por qué no se hace nada?
Murcia, también llamada, la Huerta de España.

De esa España de charanga y pandereta. Porque estas cosas, en otros países, se hacen de otra manera:

"Siete condenados por despreciar el riesgo de terremoto de L`Aquila"
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/10/22/actualidad/1350920940_372676.html

viernes, octubre 19

Y la precariedad se hizo carne

Siguiendo con el tema de las becas, las prácticas en empresa, etc; y a riesgo de ser redundante en este "re-estreno" de blog, quiero contaros lo que ha pasado en la Universidad de Alcalá de Henares.

Cuando yo entré en la carrera (curso 2005/2006) y hasta este último curso (2011/2012), la Universidad de Alcalá de Henares sacaba anualmente las llamadas "Becas de Formación".

Estas becas consistían en "pequeños empleos administrativos" de toda índole, según su presupuesto, cada departamento, cada delegación, cada decanato, cada vicerrectorado, vamos, cada unidad de gestión podía solicitar becarios para "darles soporte", aunque las becas se llamaran de formación.

Obviamente siempre algo aprendes, pero como todo, dependía de a unidad en la que te tocara, y quien tuvieras de tutor (a mi favor diré que cuando fuí Delegada General de la Facultad de Ambientales y "contratamos" una becaria para la Delegación, Sara, que así se llamaba, terminó elaborando un "manual de becario" donde explicaba todas las cosas que, en forma de emails, charlas rápidas de cinco minutos o llamadas diarias por teléfono yo le fui explicando).

Los requisitos eran haber superado el 50% de créditos de la carrera; y luego ya cumplir los requisitos particulares que tuviera cada beca.

Eran becas remuneradas según las horas, y que, viendo lo que se cobra hoy en día siendo becario, para ser becas comparables a las becas tipo 0 para estudiantes descritas en el post anterior, estaban muy bien pagadas.

Las de 3 horas diarias se venían pagando a 330 euros al mes.

Las de 4, a 440 €.

Las de 5 a  550 €.

Y las de 6,  660 €.

Para que os hagáis una idea comparativamente, las becas mejora pagadas, que son las becas tipo I (o sea que ya hay que ser licenciado), se vienen pagando en torno a 850 la jornada laboral completa (8 horas).

Había muchas becas, y en sitios muy interesantes para un ambientólogo; por ejemplo, las de educador ambiental o de técnico de germoplasma en el banco de semillas del Jardín Botánico; las de apoyo a la oficina de Ecocampus; en la oficina de Prevención de Riesgos Laborales; o incluso de apoyo administrativo a Decanato o a la Delegación: siempre venía genial trabajar en el mismo edificio donde tenías que ir a clase. Entre otras, según carreras.

A partir del curso 2012/2013 estas becas, dejan de ser remuneradas. ¿Y quién va a querer currar de administrativo gratis? Fácil, aquel estudiante de grado de ADE que tenga que hacer prácticas en empresa obligatoriamente.

La UAH coge y dice que sus becas valen como las prácticas en empresa que obligatoria o recomendadamente (como en el caso de ambientales) tienen que hacer los alumnos y chúpate esa muñeca.

¿Qué es lo que ha pasado en ambientales?
Pues como podéis comprobar en la convocatoria de "Prácticas en Empresa 2013" a través de los siguientes enlaces:
http://www.uah.es/ambientales/index.asp
http://www.uah.es/ambientales/noticias/docs/20121018_oferta_pe_ene13.pdf

Donde, hasta el año pasado, eran prácticas no remuneradas que convocaban "entidades de la administración públicas o similar" como IMDEA AGUA, el IMIDRA, ONG´s, Asociaciones de Ciencias Ambientales o Fundaciones como Biodiversidad o Felix Rodriguez de la Fuente, Jardín Botánico... (muchas de ellas que pese a todo reciben fondos europeos para llevar a cabo los proyectos que gestionan y contratar a gente y demás en ese marco), comenzamos a ver becas en empresa privada, aparentemente no remuneradas.

Es más, hay becas, como la del Hospital Clínico San Carlos, que en mi época de estudiante eran becas de prácticas en empresa remuneradas; y tengo compañeros de trabajo que hicieron allí sus prácticas.

O en Pomdi, donde creo que actualmente hay un antiguo compañero de facultad contratado ocupando un puesto que ahora ofertan en las prácticas para estudiantes y que, aparentemente, no habla de remuneración.

Esta modalidad de prácticas en empresa de la carrera han de tener una duración mínima de 400h, sin cobrar nada (a veces ni ayuda al desplazamiento, porque por ejemplo hay prácticas que son en Meco, otras en Madrid, etc).

Pero las empresas privadas no son las únicas que se apuntan al carro: ver las prácticas del ayuntamiento de Torrejón.

Afortunadamente la mayoría de ellas son de jornada parcial (ya que al fin y al cabo la condición para explotarnos gratuitamente es que seamos estudiantes y como tal, necesitamos ir a clase, más aún en grado que son obligatorias); salvo tres, una de IMDEA Agua, otra de Pomdi...

También es curioso observar los "requisitos de conocimientos previos" que indican algunas... más asociados a un técnico que a un estudiante. ¿No será que buscan ahorrarse tener que pagar un técnico? ¿No se supone que lo que te exigen que sepas ya de antemano va en relación con lo que se supone que ellos te van a enseñar?

Pero bueno, la respuesta me la sé: las prácticas en empresa son optativas; si no te gusta, no las hagas. Y claro, no digo para nada que, dadas estas condiciones, no las hagáis; tampoco digo que "qué malos son" las empresas y las entidades que convocan las prácticas o decanato que los busca y les convence de que saquen prácticas. Ea, a ver. Los habrá que verdaderamente no tengan dinero para contratar más gente, los habrá que verdaderamente os vayan a enseñar; y efecticamente es muy importante y necesario (opinión personal) que se empiece a tomar contacto con un trabajo real o entornos laborales mientras se estudia.

Lo que es triste es el tono decadente que está tomando todo esto. Ver cómo lo que era bueno se va pervirtiendo poco a poco hasta desaparecer o convertirse en un abuso justificado y deseado.

A cambio, la alternativa es realizar prácticas en empresa extracurriculares, de las que recomiendo las becas START de la Fundación Universidad Empresa, que acaba de sacar de hecho 34 de ellas y hay al menos una para ambientólogos; y, de vez en cuando algunas sí son remuneradas.

Buena suerte.

miércoles, octubre 17

El distinguido arte de ser PREbCARIO



A muchos se nos cae el mundo encima cuando, después de un inhumano esfuerzo, terminamos la carrera, superando asignaturas que considerábamos dificilísimas, y empezamos a mandar curriculums como quien echa monedas en una tragaperras.

Alguna vez tendremos suerte, y a lo mejor, nos convocan a una entrevista, nada más lejos de la realidad que, si somos tan afortunados de que fuera para algo relacionado con lo nuestro, nos daremos de golpe y porrazo con preguntas cuyas respuestas desconocemos, tipo:

¿Sabes lo que es la Responsabilidad Social Corporativa? ¿Sabes elaborar Memorias de Sostenibilidad? ¿Sabes calcular la huella de carbono de mi empresa? ¿Sabes lo que es la Global Reporting Initiative? ¿Has estudiado o tienes experiencia en el Dow Jones Sustaintability Index? ¿Sabrías implantar un Sistema Integrado de Gestión (Calidad, Medio Ambiente y PRL)? ¿En qué otras ISOs, además de la 14001, tienes experiencia y/o conocimientos? ¿Sabes hacer auditorías energéticas? ¿Podrías diseñar y calcular los KPI´s del departamento? ¿Sabes lo que es un cuadro de mando integral? ¿Sabes lo que es el Marcado CE para productos X y su regulación? ¿Sabes usar AUTOCAD?


Todo esto es lo que está de moda, y lo que se lleva a día de hoy en la empresa, y por tanto, lo que se pide a un perfil de Técnico en Medio Ambiente. ¿Podríais afirmar a ciencia cierta que sabéis hacer alguna de estas cosas nada más terminar la carrera incluso con una matrícula de honor?

Los más, sabréis un poco de qué va el tema. Pero ninguno “sabemos hacerlo” nada más terminar la carrera: no nos lo han enseñado (hablo de saber HACERLO, no de saber de qué va).


En el hipotético caso de que en la entrevista seamos capaces de “dar el pisto” al entrevistador y convencerle de que estamos puestisísimos y preparadísimos en todo esto que nos pregunta (porque al menos, nos suena y sabemos de qué va aunque no sepamos hacerlo), y nos cogen, pasaremos unos meses de sufrimiento infinito, estudiando más que en 2 años de la carrera, para salir al paso y llevar a cabo el trabajo. Pero, la mayoría de las veces, simplemente no nos cogerán para el puesto.

Sobre el grado de adaptación del grado en ambientales al mercado laboral, me guardo mi opinión. Pero, ante esta realidad, siendo proactivos, ¿qué podemos hacer?


Fácil: iniciarnos en la carrera de precarios.

Hay tres tipos de becas a las que podremos ir optando a lo largo de nuestra vida.

Becario tipo 0: prácticas en empresa. Estas prácticas se realizan mientras todavía estás estudiando, es decir, matriculado en un grado. Normalmente para optar a ellas suelen pedirte tener un porcentaje mínimo de créditos aprobados (variará según cada Universidad). Todas las universidades tienen un “departamento” llamado el COIE (Centro de Orientación e Información de Empleo) que es el que se encarga de establecer convenios con las empresas para este tipo de becas; no obstante, este proceso también se puede hacer al revés: que nosotros contactemos con la empresa, le propongamos ser sus esclavitos, haya feeling, hablamos con el COIE, les presentamos, y surge el amor en forma de Convenio. Un convenio que, aunque suena a algo super complejo, un proceso largo, negociaciones, papeleo; es simple y sencillamente un papel normalmente de una o dos caras que tiene que firmar la empresa y remitir a la Universidad; nombrando quién va a ser tu tutor y qué se te va a enseñar en la empresa, cuánto tiempo vas a estar y sueldo.

Dentro de las becas de tipo 0, a su vez, las hay de dos tipos.



- Prácticas curriculares: están incluidas dentro del “Plan de Estudios del Grado”, bien como asignatura transversal, o incluso obligatoria (según plan). Forma parte de tu formación para ser graduado y se te reconoce con créditos (obligatorios o transversales). Lo usual es que sean prácticas no remuneradas, y a tiempo parcial de tal forma que nos permita compaginarlo con otras asignaturas de la carrera. Para ejemplo un botón: las de nuestra facultad. También es otra manera para que, entidades, organismos y demás unidades de la administración pública (que son los que más pobres están) se ahorren mano de obra con la excusa de que, “encima que nos molestamos en formarlos” (que al final eso dependerá de que te toque un tutor o compañero majo o no).

- Prácticas extracurriculares: no incluidas en el “Plan de Estudios”; pero, en ocasiones (según qué universidades), convalidable por créditos de libre elección o transversales. No es obligatorio cursarlas. Las condiciones, parecidas: estar matriculado de alguna carrera con un porcentaje mínimo de créditos superados y el convenio con el COIE. Estas han sido las prácticas en empresa de toda la vida, y os puedo asegurar que hace no tanto, lo raro era que no fueran remuneradas; mejor o peor, siempre te pagaban algo. De estas se pueden encontrar muchas ofertas en portales de empleo en internet. Las distinguiréis por la palabra “becario” o “assistant” y porque en requisitos mínimos imprescindibles pone “posibilidad de establecer convenio con centro de estudios”.
Mi consejo, intentad que sean siempre remuneradas. El hecho de que os enseñen más u os enseñen menos no va a depender de si os vais a algún centro público de investigación (normalmente, becas no remuneradas- curriculares) o a alguna empresa (a veces, remuneradas-extracurriculares): creedme, conozco casos de gente que se ha pasado meses ignorada frente a una pantalla de ordenador sin que nadie le enseñara nada, matando el tiempo y en el mejor de los casos fotocopiando o archivando tanto en fundaciones públicas como en empresa privada. Lo que uno aprenda va a depender mucho de en qué departamento te toque y con qué tutor, y también de lo proactivo que uno sea.

No obstante, tened claro que con estas becas no cotizáis: ni para el paro, ni para la jubilación, ni para la sanidad. Os retienen un 5% en concepto de “seguro escolar” pero ya (en caso de que cobréis, claro). Además, las Universidades se cuidan muy mucho de limitar el número de meses máximo que podemos ser becarios: cumplidos esos meses, se acabó. Y cada vez son más estrictos y dan menos meses: por un lado, para que las empresas “no abusen” de nosotros (aunque nosotros nos matemos para que abusen de nosotros), y por otro, para que exista la mayor rotación de gente posible en las becas y el mayor número de alumnos pueda disfrutar de ellas.

Y por supuesto, no contéis con que os contraten al terminar, ni aunque de la casualidad que justo ese mes que se os termina la beca hayáis terminado la carrera. Eso sería la excepción, aunque antes sí pasaba (en la empresa donde yo entré de becaria de este tipo, había directivos que habían entrado en su día como becarios…; pero eso hoy es impensable).


Estas prácticas pueden suponer un esfuerzo muy grande. Muchas veces los horarios serán incompaginables con las clases. Otras, el lugar donde tenemos que ir a trabajar está muy lejos de nuestra casa y muy lejos de la Universidad e invertiremos infinitas horas en transporte público (y dinero). Y encima, estamos perdiendo dinero en transporte y tiempo gratis, porque no nos pagan.

Pero yo creo que, aun en el peor de los escenarios, siempre se aprende algo: aunque sea cómo funciona una empresa, o una fundación, o un instituto; cómo se organiza; qué herramientas se utilizan… Como primera toma de contacto con la empresa es fundamental.


Becario tipo 1: los llamados “becarios de introducción a la empresa”. Hay varias fundaciones que ofrecen este tipo de beca. Las condiciones suelen ser que no haga más de dos años que has acabado la carrera, y que nunca hayas trabajado en calidad de lo que eres (es decir, por ejemplo, que nunca hayas tenido un contrato donde pusiera que eras “Técnico Ambiental” o “Consultor Ambiental”, etc); aunque he de añadir que esto creo que no lo “miran”, sino que te hacen firmar una declaración jurada de que nunca has trabajado; pero vamos, que no te piden tu vida laboral (de momento).


Las fundaciones que yo conozco que realizan este tipo de becas son:


- Fundación Universidad-Empresa (FUE). A mi parecer, la que mejores becas tiene. Sus becas suelen durar en torno a un años, además, todas llevan incluido algún tipo de programa de formación en alguna universidad; te contratan un seguro de salud privado completo con adeslas; los sueldos no son lastimosos (en torno a 700 euros, es decir, por encima del sueldo mínimo interprofesional) y tienen acuerdos con empresas líderes y multinacionales. Con estas becas antes se cotizaba (para jubilación y para sanidad, no para paro). Desde el 1 de Octubre de 2012 la Tesorería de la Seguridad Social dio orden de que dejáramos de cotizar. Ea.
A su vez tienen varios tipos de beca:
 START-UP: estas becas son para becarios tipo 0. Son becas de prácticas en empresa para estudiantes de grado. Suelen ser de jornada parcial.


 GAIA: son becas en empresas fuera de España. El CIFF de la UAH está metido en la gestión de este tipo de becas; también tienen una formación de posgrado, además de las prácticas internacionales, a cargo de la UAH, pero con posibilidad de hacerla online.


 OPTIMUS: la duración es de 12 meses (excepcionalmente prorrogable hasta 18). Lleva acompañada 160 horas de formación con un título propio de posgrado de la Universidad de Francisco de Vitoria, donde te enseñan Habilidades sociales, liderazgo, inglés, presentaciones eficaces, cómo hablar en público, historia… Vamos, conocimientos generales y sobre todo currículum blando. Haces la formación en dos módulos de 15 días; en los que dejas de ir a trabajar para ir a clase de 10 a 19 horas.


 CITIUS: a mi opinión la mejor. Es como la Optimus sólo que la formación es continua: todas las semanas tienes que ir a clases algunas tardes a la Universidad Complutense (también te dan un título propio de posgrado), y te enseñan asignaturas más consistentes y relacionadas con la gestión empresarial (economía, auditoría, derecho, etc). Lo que ocurre es que es más duro, porque de que sales de trabajar, según tu horario, tienes que ir corriendo a clase al centro de Madrid.

- Fundación SEPI. En sus “Programas de Inserción Laboral para Jóvenes Titulados”. No hay unos tipos de becas con programas formativos asociados como en la FUE; sino que cada empresa plantea sus condiciones de beca. Sí que he observado que, siendo las becas muy diversas según la empresa que convoca, suelen tener una remuneración algo menor que las de la FUE, duran menos meses y no llevan asociada formación universitaria; el pro es que algunas de las multinacionales más potentes o quizá más interesantes o que más están trabajando en medio ambiente convocan becas a través de esta fundación (por ejemplo, Red Eléctrica de España, o Deloitte, Tragsa, Enresa…).

Becario tipo 2: dándole la vuelta al rizo, muchos de los másteres hoy en día llevan “anexadas” como ventaja para vendérnoslos, prácticas en empresa (muchas veces obligatorias, sobre todo para aquellos másteres fuera del entorno Universitario, más enfocados a la empresa, que ofrecen escuelas de negocio). A veces nos la dará la propia entidad del máster, otras nos tendremos que buscar nosotros las castañas (misma metodología que para tipo 0, convenio, llorar a las empresas y en páginas web de empleo también hay muchas ofertas). Normalmente, a nivel de máster, las prácticas sí que suelen estar remuneradas, pero como mucho, como pueden estarlo las becas de la FUE. Suelen tener una duración de 3 a 9 meses (según lo que dure el máster y, sobre todo, si te dejan cursas las prácticas mientras estudias el máster o tiene que ser una vez has finalizado, o si tienes que realizar a través de las prácticas el proyecto fin de máster; de si te dejan empezar las prácticas nada más empezar el máster o si tienen que pasar unos meses de clase antes de que puedas empezarlas, etc).

Echando cuentas...

6 meses de becario tipo 0 + 12 meses de becario tipo 1+ 6 meses de becario tipo 2 = ¡2 años de experiencia! (años cotizados = 0)


Así que ya sabéis: aquí el que no se deja explotar es porque no quiere.